“Este mandamiento, HIJO Timoteo, te encargo, para que conforme a las profecías que se hicieron antes en cuanto a ti, milites por ellas la buena milicia”
(1 Timoteo 1:18)
EL hijo de Dios debe desarrollarse dentro de los contextos que Dios Padre le va revelando. De esta manera crecerá no solo en su estatus ante Dios sino en su alcance en el reino de Dios. Como dice la escritura: “que siguiendo la verdad en amor, CREZCAMOS EN TODO en aquel que es la cabeza, esto es, Cristo” (Efesios 4:15).
En esta entrega sobre Los Hijos de Dios observaremos las diversas dimensiones que un hijo de Dios debe experimentar y crecer en cada una de ellas. De esta forma traerá gloria y honra a su Dios. Y de igual forma disfrutará de las bendiciones que conlleva. ¡Veamos!
-HIJOS DE DIOS. 1 Juan 3:2 declara: “Amados, ahora SOMOS hijos de Dios, y aún no se ha manifestado lo que hemos de ser; pero sabemos que cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque le veremos tal como él es”.
Esto nos muestra tres verdades bien claras.
Primero, que nuestro estatus actual como Hijos de Dios es tanto instantáneo (cuando recibimos a Cristo como nuestro salvador), así como progresivo (según crecemos en Él). Lo segundo es que llegará un día en que nuestra nueva naturaleza como Hijos de Dios será plena. Y lo tercero es que lo que Dios prometió en cuanto a nuestra condición de Hijos se cumplirá afectando a toda la creación!!! Por ello la escritura declara: “Porque también la creación misma será libertada de la esclavitud de corrupción, a la libertad GLORIOSA de los hijos de Dios” (Romanos 8:21).
Debemos, de manera consciente y sistemática, conducirnos conforme a lo que AHORA somos, a lo un día seremos y al impacto que esto tendrá en el mundo.
-HIJOS EN LA FE. La primera carta del apóstol Pablo a Timoteo inicia con un título muy especial dado a este joven ministro. “a Timoteo, verdadero HIJO EN LA FE: Gracia, misericordia y paz, de Dios nuestro Padre y de Cristo Jesús nuestro Señor” (1 Timoteo 1:2).
¿Qué habrá hecho merecedor a Timoteo de semejante distinción de parte de este gran apóstol? Y aún más especial es, pues Pablo NO ganó a Timoteo para Cristo. Ya Timoteo era creyente cuando Pablo lo llega a conocer. Literalmente Pablo lo prohijó espiritualmente y se convierte en su mentor y padre espiritual. (Leer Hechos 16:1-5)
Sencillo! Timoteo había sido no solo un creyente ejemplar, sino que llegó a ser un brazo de apoyo incondicional para Pablo. Tanto así que el apóstol habla de él en términos de…“TIMOTEO, que es mi HIJO AMADO Y FIEL en el Señor” (1 Corintios 4:17).
Líderes como Timoteo son de incalculable valor para todo pastor en el cuerpo de Cristo.
Oh Dios! Gracias por los Timoteos de hoy!!!
-HIJOS DE LA CASA. Hebreos 3:4-6 nos habla de la fidelidad de Moisés sobre la casa de Dios y de Jesucristo como precursor de nosotros como casa de Dios en espíritu. Esta escritura declara: “Pero Cristo como hijo sobre su CASA, la cual CASA somos nosotros, si retenemos firme hasta el fin la confianza y el gloriarnos en la esperanza” (Hebreos 3:6).
Ahora bien, en el sentido eclesiástico, Dios nos llama a ser hijos fieles, plenamente identificados con nuestra casa (congregación). Mostrándolo en al menos tres dimensiones:
A) En ASISTIR a las actividades, reuniones en el templo y Grupos Pequeños en las casas. Hebreos 10:25 dice: -no dejando de congregarnos, como algunos tienen por costumbre.
B) En APORTAR de nuestros recursos para el sostenimiento y operación de la obra. Malaquías 3:10 ordena: Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa.
C) En INVOLUCRARNOS en la misión de la casa. La evangelización. En Lucas 14:23 dice: “Ve por los caminos y por los vallados, y fuérzalos a entrar, para QUE SE LLENE mi casa”.
-HIJOS EN EL MINISTERIO. En 1 Corintios 16:10 el apóstol Pablo una vez más usa a Timoteo como referente y ejemplo. Y declara: “Y si llega TIMOTEO, mirad que esté con vosotros con tranquilidad, porque él hace la obra del Señor así como yo”.
Como hijo ministerial Timoteo mostraba cualidades dignas de imitar:
A) Como hijo en el ministerio era INSTRUIDO y CAPAZ (2 Timoteo 2:15 y 3:15).
B) Como hijo en el ministerio era SUMISO Y LEAL (1 Timoteo 6:20-21, Filipenses 2:19-22).
C) Como hijo en el ministerio Timoteo operaba como Pablo, con MÉTODO y ESPÍRITU similar (1 Tesalonicenses 3:2 y 1 Corintios 16:10).
D) Como hijo en el ministerio guardaba BUEN TESTIMONIO dentro y fuera de la iglesia (Hechos 16:1-2, 1 Timoteo 4:12 y 5:22).
Como se necesitan en las congregaciones líderes así!!!
Pensamiento Final.
1. ¿Nos Estamos Desarrollando Como Hijos de Dios? ¿Vivimos Una Vida Conforme A Lo Que Somos En Cristo?
2. ¿Vemos a nuestros Pastores como Nuestros Padres Espirituales? O ¿Todavía No Nos Hemos Identificados Como Tales?
3. ¿Veo la iglesia Como Parte Importante de Mi Vida? O ¿Todavía No estoy Dispuesto a Sacrificios Radicales Por Ella?
4. ¿Estoy Activo y Comprometido en el Servicio a Dios? O ¿Espero que Otros Hagan La Obra de Dios Mientras Observo?
¡BENDICIONES!
-Ptor Héctor Murillo